«¡Qué difícil es aceptar lo desconocido! Todos nosotros llevamos en nuestro interior a un tirano puntilloso que, lo que no se puede explicar, piensa que es inventado y, por lo mismo, inadmisible.
Existen ciertas personas que exigirían, en caso de que se les apareciera un ángel, una pluma de su ala para adornar el comedor. No obstante, hoy sé que más allá de lo que se cree real y de lo que se supone fruto de la imaginación, se encuentra la más deseable puerta del mundo. Esa puerta da al jardín de la vida, un paraíso que los sedientos de pruebas jamás conocerán.»
Luis Ansa «Las siete plumas del Águila.»